Evolución de la matrícula en estudios de Grado en los últimos 20 años

Este análisis forma parte de un estudio sobre demografía y matrícula universitaria en estudios de grado que puede consultarse aquí. Existe también otro estudio que se circunscribe a la matrícula de mayores de 25 años en estudios de grado.

El periodo a analizar se corresponde con los cursos académicos completos sobre los que consta información en DATUZ en la fecha de elaboración del informe, es decir, desde el curso 2000/01 hasta el 2019/20.

Tabla 1. Evolución del número de matriculados en diplomaturas, licenciaturas y estudios de grado.

Como puede observarse, se produjo un continuado descenso del número de matriculados entre 2000/01 y 2008/09. A partir de entonces y hasta el curso 2013/14 la matrícula se mantuvo estable en torno a los 30.000 estudiantes. Desde el curso 2014/15 se ha experimentado un lento pero constante descenso hasta quedar en el entorno de los 26.500 matriculados desde el curso 2017/18.

Gráfico 1. Evolución del número de matriculados en diplomaturas, licenciaturas y estudios de grado.

A continuación, se ofrecen datos sobre los matriculados de nuevo ingreso en diplomaturas, licenciaturas y estudios de grado, es decir, de los estudiantes que acceden a un estudio universitario por la vía de preinscripción.

Tabla 2. Evolución del número de matriculados de nuevo ingreso en diplomaturas, licenciaturas y grado.

En este período se produce un descenso continuado de matriculados de nuevo ingreso hasta el curso 2006/07. A partir de entonces se mantiene una cierta estabilidad, con repuntes en los cursos 2008/09 a 2010/11 y 2012/13, seguidos de unos cursos en los que se pierde el número de matriculados de nuevo ingreso que se había recuperado, hasta quedar casi en mínimos de la serie.

Gráfico 2. Evolución de la matrícula de nuevo ingreso en diplomaturas, licenciaturas y grado.

Es preciso destacar varios factores que han podido tener un impacto directo en la evolución de la matrícula. En todo el territorio nacional hubo un descenso de matriculados desde el año 2000 al 2007 pasando de 1.555.174 universitarios a 1.421.651, una caída de más del 8%. Además en los años previos ya había comenzado una ampliación del mapa de universidades, sobre todo de carácter privado, que empiezan a poner en marcha nuevas titulaciones por toda España y que reordenó la distribución de matriculados. El número de universidades privadas se dispara desde las 7 del curso 1994/95 a las 34 del curso 2017/18, llegando a captar en la actualidad el 15% de los estudiantes matriculados de grado del Sistema Universitario Español (SUE).

En este contexto, las universidades públicas pierden un 11% de estudiantes pero es que en el caso de la Universidad de Zaragoza esta caída llega al 25%.

Fuente de datos: Ministerio de Educación, www.epdata.es

Como vemos, de los 159.123 estudiantes que pierden las públicas en esos 7 años, sólo 25.600 pueden explicarse por la captación de alumnado de las privadas.

También es necesario valorar el impacto que pudo tener la implantación del distrito abierto como forma generalizada de admisión en las universidades públicas a partir del curso 2001/02, algo que sin duda favorecía la movilidad interregional. En la tabla 3 se trata de visualizar el impacto de estos factores sobre la matrícula de nuevo ingreso.

Tabla 3. Evolución del número de matriculados de nuevo ingreso en diplomaturas y licenciaturas por comunidad autónoma de residencia familiar en el periodo 2000-2007.

Como puede observarse, quizás como consecuencia de la creación de nuevas universidades y de la implantación del distrito abierto, disminuyen los estudiantes de nuevo ingreso de nuestra comunidad autónoma en una cifra superior a los 1.000. Y, aunque aumentan en 265 estudiantes los procedentes de otras comunidades, sobre todo de Cataluña o de la Comunidad Valenciana, apenas compensan los casi 1.200 aragoneses que dejan de matricularse en nuestra universidad.

Otra circunstancia que puede haber influido en la reducción de la matrícula, sobre todo a partir de 2010, es la reforma de las normativas de permanencia de las universidades, que por regla general endurecieron las condiciones para muchos estudiantes si no superaban un determinado número de créditos.

Pero además de todos estos factores merecen ser también destacados la implantación de los estudios de grado adaptados al Espacio Europeo de Educación Superior y la gran crisis económica que comenzó en España en 2007.

La modificación del sistema universitario provocó que se pusieran en marcha en la Universidad de Zaragoza 12 nuevos estudios en el curso 2008/09, 5 en 2009/10 y 38 en 2010/11, lo que se traduce en la implantación de 67 nuevos planes de estudios en un lapso de 3 años. Esto es así porque algunas titulaciones se ofertan en varias localidades y se gestionan como planes diferentes.

El hecho de que en 2008 y 2009 se implantaran los grados con anticipación a las universidades públicas de las comunidades autónomas de nuestro entorno pudo influir, aunque la evolución de los estudiantes procedentes de esas comunidades autónomas durante los años de repunte de la matrícula de nuevo ingreso es bastante desigual. Se constata un incremento de estudiantes procedentes de Navarra, La Rioja, Castilla y León y Comunidad Valenciana, mientras descienden los estudiantes catalanes y vascos.

Tabla 4. Evolución del número de matriculados de nuevo ingreso en diplomaturas, licenciaturas y grado por comunidad autónoma de residencia familiar en el periodo 2007-2012.

Es oportuno señalar que la implantación de grados no supuso un aumento en el número de plazas ofertadas. Es más, éstas disminuyeron. Por tanto, el incremento de matrícula no puede interpretarse como una reacción a mayor número de plazas, sino como una mejor adecuación de la oferta a la demanda, dado el incremento habido en el índice de ocupación de plazas. También es posible que, al acortar la duración del periodo formativo, la oferta de los estudios de grado resultara más atractiva.

Tabla 5. Evolución del número de plazas ofertadas e índice de ocupación (cociente entre plazas matriculadas y ofertadas) en diplomaturas, licenciaturas y grado.

Asimismo, no se puede pasar por alto el estallido de la importante crisis económica que se inició en 2008 y que pudo impulsar a iniciar estudios universitarios a colectivos que, de otro modo, no se lo hubiesen planteado. Fruto de esta crisis económica, también disminuyó notablemente la población de la comunidad autónoma. El cambio en la situación social invirtió los flujos migratorios y la población, que hasta entonces ascendía de forma sostenida por la recepción de inmigrantes, se redujo en casi 30.000 habitantes en seis años. Del mismo modo, una parte de la población autóctona se vio forzada a buscar empleo en otros países.